CERSIS y El nacimiento de Eitary

Parte de esta historia mi mente la ha perdido, debido a que algunos recuerdos de mi mente fueron encriptados mediante una serie de procesos sucedidos en la acción de mi captura.

Trabajaba en Arista, la luna progresista de Coelorus. Yo era una científica que por el momento solo podía obedecer ordenes de mis superiores, uno de ellos era la capitán Rithsma kerlach , un personaje poseído por las ordenes tiránicas de el general Corven Gatika , un individuo que solo podía dar ordenes pensando de la cintura para abajo, simplemente un ser detestable al cual todos debíamos obedecer.

No veía a ninguno de ellos dos muy seguido, solo día por medio venia Rhitsma a controlar y revisar que todo funcionara de la forma debida. El general Corven nunca aparecía. Hasta ese momento todo funcionaba normal, yo trabajaba para la república como una ciudadana mas que integraba uno de los grupos novatos de Arista.

Mi grupo era reducido y no interactuavamos lo suficiente como para llegar a una gran relación grupal, simplemente hablábamos lo necesario sobre el trabajo, raramente oía algún comentario sobre la capitán, quien no levantaba muchos votos a favor entre los presentes.

Preparábamos un proyecto para presentar al parlamento, un proyecto que por ser nuevos estábamos obligados a hacer. Diseñamos un nuevo arma del tipo bacteriológica que serviría para aislar de el sistema solar las bases nesics que constantemente nos estaban atacando.

Para eso tuvo que presentarse en una entrevista todo el equipo de trabajo junto con la capitán Rithsma y el general Corven, el cual decía estar muy orgullosos de nosotros.

Coelorus insistió en premiarnos con unas medallas, que no nos servían para nada. Corven fue el encargado de poner en nuestros cuellos las medallas y darnos la mano.

Terminada la aburrida ceremonia regresamos al trabajo, comenzando con nuevos proyectos.

Al otro día Rithsma regresa a tratarnos como de costumbre, mal. Entonces escucho que me llama por mi numero identificador (83038), me presento cordialmente y sin chistar, ella me dice que corven quiere verme, me obliga a caminar delante de ella como si fuese un reen o un preso, todavía no logro comprender porque nos trataba tan mal.

Cuando entro al directorio 6s Corven le ordena a Rithma que se retire a su puesto rápido, yo estaba un poco intrigada por la llamada,.

Entonces convine me dijo que me había destacado en mi trabajo durante el proyecto ultimo y que por esa razón yo trabajaría aparte del equipo para el, como una especie de socia pero con la diferencia de que yo no le tenia ni un poco de confianza. Acepte, pues no tenia muchas alternativas con respecto a la decisión, mi carrera dependa de ese nuevo trabajo, aunque desconfiaba de sus intenciones tan gratas.

Después de eso fui a mi cuarto, debido a que ya había terminado la jornada de trabajo y nos sucedía el grupo siguiente, el cual continuaba nuestras investigaciones, de todas maneras no me preocupaba ya que trabajaría en un proyecto mas importante, me acosté y me quede completamente dormida.

Al día siguiente me presente impecable como siempre una vez mas en el directorio 6s del general Corven Gatika, el me miro extraño pero la verdad me importo muy poco, dijo que había tomado la importante decisión de poner mi cuarto al lado del suyo si trabajo horas extras y a un diferente ritmo del normal.

Le pregunte si era necesario mudarme de sección, me contesto que era mas que importante porque tenia que trabajar cerca de donde el trabaja para compartir el tiempo.

Así fue como tuve que mudarme de sección, sus condiciones para el trabajo eran insoportables, durante meses estuvo rondando como mosca sin saber que hacer a mi alrededor mientras trataba de trabajar, era evidente que no tenia ni la mas mínima idea de lo que era realmente la investigación, no me dejaba trabajar en paz con sus estupideces de intentar ser amable con migo, como compañero de trabajo la cosa mas pesada y molesta que vi en la vida, nada mejor que el silencio antes que esto, siempre tratando de agradarme con sus gestos poco ingeniosos, siempre buscando una buena respuesta de mis labios..

Una mañana despierto y encuentro que esta sentado esperando que yo despertara, lo que mas me asusta es imaginar como entro, supongo que sabia la combinación de la puerta, eso me pasa por no conseguir una habitación mas antigua con clave genética. La cuestión es que estaba hay, molestándome como siempre, menos mal que estaba bien tapada, me molesto su imprudencia, no puede hacer eso, por lo tanto me enoje y le pedí que se fuera, el me dijo que era el general y yo le debía respeto, le conteste que yo era una ciudadano de Coelorus y que el me debía respeto también, se enojo con migo y se resistió a irse, le dije que iba a denunciarlo al parlamento porque así lo disponían mis derechos, también le dije que regresaría a mi antiguo puesto y que de inmediato me mudaría de sección, me pidió disculpas de una manera poco convincente, me dijo que dormida era hermosa luego se levanto de mi cama y se fue, lo cual me puso mucho mas furiosa, le tome mas odio del que le tenia anteriormente, tenia claro no me era conveniente enfrentarme a el ahora , debía volver a mi puesto de trabajo y seguir obedeciendo sucias ordenes hasta que consiga un poco mas de poder sobre el o me canse de esperar a tener un buen puesto y lo mate.

Cuan regrese a mi antiguo puesto Rithsma sabia de lo sucedido, lo cual para ella era terriblemente aberrante, me castigo con un estúpido doble turno, como si a mi me molestase investigar durante dos días y tres horas de descanso, no me molestaba pero era muy cansador.

Corven seguía molestándome a distancia, mandaba a la pesada de Rithsma, la cual evidentemente admiraba de mas al general, para que hiciera cosas totalmente fuera de la investigación realizada.

El General vino a mi sección y me pidió que lo acompañara de nuevo a su directorio, su rostro me tenia cansada, verlo me daba nauseas, me dijo que era una orden y tenia la obligación de obedecer, yo me preguntaba porque, si había seguido la carrera científica, no la militar. Entonces, cundo llegamos me ordeno que lo besara, le conteste que no, se acerco y me repitió que tenia que besarlo, me volví a negar mientras en mi mente me preguntaba donde estaba la computadora principal de Arista cuando uno la necesita, se supone que esta para defender a los ciudadanos de este tipo de psicópatas, entonces me tomo del brazo desprevenidamente y me arrojo al suelo, me dañe la cabeza, mi chip de defensa era frágil. Le pregunte que quería de mi,entonces me dijo que era una orden y que no quería tener que obligarme, por supuesto me negué, me levante del piso y dijo que si no lo hacia peligraban mis días como científica en Arista, me hablo de que tenia poder político y que no podía salvarme esta vez, que le fascinaban todos mis movimientos y actitudes, que estaba loco por mi frialdad extrema y mientras parloteaba estupideces lo golpeé para que me soltara, tome algo que encontré sobre su mesa y se lo partí en la cabeza, salí corriendo y la computadora después de un rato, y no entiendo porque no antes se activo, me encerró como si fuese yo la criminal, entonces corven se acerco y cuando iba a continuar con su estupidez llego rápidamente Rithsma junto con dos guardias que nunca había visto, Corven invento una historia de que yo tenia envidia por su puesto de mando y que quería usurparlo mediante tácticas no legales, por supuesto que Rithsma le creyó absolutamente hasta la ultima palabra de su mentirosa boca, yo no tenia derecho a hablar.

Decidieron castigarme con el proyecto de una investigación al universo nesic, prácticamente mandándome a tierras desconocidas con la intención de que jamas volviera, Corven juro que volvería a buscarme, me lo dijo cunado me asignaba un punto de referencia para iniciar la investigación, yo en parte estaba contenta, hasta el infierno seria mejor que seguirlo soportando.

No supe de ellos, me emprendí en una travesía de futuro desconocido, estaba segura de que cuando volviera iba quejarme al parlamento por lo sucedido.

Yo seguí con mis investigaciones a pesar de aquel rencoroso grupo que solo pensaba en derrocarme y aniquilarme de la fas de la luna.

tres años, hasta que en una de mis investigaciones mas serias “ El estudio de los comportamientos nesic”

Descubrí en una de sus asquerosas cuevas a un individuo que no pertenencia a ninguno de los dos mundos, ni al nesis ni al mio, al principio se origino un rechazo muy grande e incomprensible, lo odiaba, no podía soportar que se acercara, aunque sabia que era en siento punto esencial para el estudio.

Mantuve contacto con el durante tiempo, tratando de descubrir de donde era y que buscaba esa noche entre los nesics. Entonces surgió algo extraño en mi, algo que jamas había sentido, algo mas doloroso que la humillación pero mas hermosos que el verdadero placer de descubrir algo nuevo. Me había enamorado perdidamente de todos sus gestos y acciones, cada palabras suya me paresia sagrada, pero me negaba a reconocerlo, debido a que era para mi una forma de antiporgresimo e iba en contra de toda pensamiento aristico.

Durante días pensaba en el y lo peor de todo es que me negaba la realidad, me decía ami misma que yo lo amaba como quien ama el resultado de una buena prueba de laboratorio, claro que eso no lograba engañarme, porque pasaba noche y día soñando con volver a escuchar su voz..

Resulto ser Ikarus, comandante de la base kinetix y dueño de mi locura, la cual al poco tiempo en Arista se hizo evidente, debido a que la entidad que controla la luna sabe hasta el ultimo movimiento realizado por sus habitantes.

Tuve que regresar con Corven Gatika para informarle de mi investigación, el celoso por lo que se sabia de mi invento que yo estaba pactando con el enemigo y que esas eran consideradas actitudes de antiprogresista y subversiva , también menciono que estaba en contra del sistema Aristo y que buscaba una rebelión ante el mencionado, ya que había traicionado a mi equipo de trabajo y sus superiores incumpliendo importantisimas ordenes y por eso se me había encomendado esa misión sin retorno seguro de la que volví.

Envió archivos al parlamento y después de un mal juicio, creo, que el peor en la historia de Coelorus, fui enviada a el campo AC19645782 Cersis, la prisión de cadena perpetua que existe en Agmar. Ya me consideraba muerta, lo único que deseaba era volver a escuchar la voz de Ikarus por ultima vez, y en forma de protesta se lo grite al parlamento mientras era transportada por dos androides a una nave que me llevaría hacia mi destino final.

Cuando entre a la nave los androides se fueron, fui sedada y olvide lo que sucedió hasta que en Cersis llegue a una habitación donde en frente mio podía ver dos entradas, una con un gran portal cuyo cartel indicador decía Sala3 y otra con una puerta mas chica que decía en su cartel Sala 4, ambas me permitían ver su interior, estaban llenas de celdas también numeradas.

Yo no podía moverme, solo observar a donde me llevaba la cinta transportadora en la cual habían depositado mi cuerpo, me movía lento, tenia inyecto en la sangre un liquido que me daba esa inmovilidad cadavérica.

Continué por la cinta y pase por un sector que me despojo de mis vestiduras, luego vi que pasaba por la gran puerta de la sala cuatro, llegue a ver que habían aproximadamente 30 celdas todas numeradas con una C y su numero correspondiente, la miá fue la C28 celda 28, seguía inmóvil y estaba asustada.

La compuerta metálica de una celda del tamaño de una capsula corporal se abrió, una maquina tomo mi cuerpo con una especie de pala y lo metió bruscamente dentro de la celda, una maquina interna acomodo mi cuerpo en una forma recta y ordenada.

Era extraño, sus paredes estaban recubiertas con una especie de células que absorción mi energía constantemente, me sentía muy cansada, no podía ver mi cuerpo ya que no me podía mover.

Tiempo mas tarde pude mover mis dedos, pero tenia muy pocas fuerzas porque ademas de que el efecto de aquel sedante había pasado las células fotoenergicas estaban absorbiendo mi energía vital sin discriminación.

Sobre mi había una luz intensa que me segaba la vista, me costaba mantener abierto los ojos.

No se durante cuanto tiempo sucedía pero se que cada 3 horas aproximadamente de esa luz bajaban un grupo de agujas que se injertaban en mi piel, mientras se hundían cauterizaban mis heridas y no perdía nada de sangre, tampoco sentía dolor solo podía sentir la sensación del metal hundiéndose en mi carne, por todo mi cuerpo, creo que serian un total de 15 o mas agujas, todas sostenidas por un pequeño engranaje que las hacia bajar e injertare en todo mi cuerpo, las ultimas iban en mi cabeza y me quedaba dormida, una en cada ojo, clavadas en el centro del iris, la ultima no la podía ver, pero la sentía penetrar el centro de mi cráneo, después la oscuridad, no se por cuanto tiempo estaba inconsciente, para despertarme las agujas me daban un volteo eléctrico de una magnitud que no pude averiguar jamas, solo se que me producía dolor, era una de las pocas cosas que lo hacían, después de eso despertaba y las agujas se retiraban de mi cuerpo tal como entraron, primero las de mi cabeza, luego las de mi cuerpo y mas tarde las de mis extremidades.

Así durante mucho tiempo, no puedo determinar cuanto, pero me paresia una eternidad.

Sucedió una vez que por alguna extraña razón pude mover mi cuerpo, mis manos estaban grises al igual que el resto de mi cuerpo, estaba congelada y no veía bien, mis uñas tenían una negra coloración que jamas había visto en ningún cuerpo con vida.

Comencé lentamente a moverme, me acomode en un rincón de la celda, al rato comenzó nuevamente el extraño proceso de las agujas, pero no pudieron llagar a mi cuerpo, vi como se hundían las primeras en una almohadilla que había debajo mio, las segundas luego y las tres ultimas. Después de estas tres se encendió una luz pequeña de color rojo junto con el sonido de una alarma. Al instante se abrió la puerta metálica de la celda y pude ver un robot que arrancaba las agujas con los cables de la almohadilla como buscando mi cuerpo, deposito nada en sus palas, y yo aproveche la única oportunidad de escapar subiéndome a el.

Entonces pude ver que ya mi sala no era la sala 4 sino que formaba parte de un gran lugar lleno de celdas como la miá, también vi miles de robots, como en el que me encontraba, llevando cadáveres desgastados en sus palas, miles de millones de celdas, paresia no acabar jamas, evidentemente las salas se separaron de el lugar desde donde podía ver los portones a la sala 3 y 4 uniendo a todas la celdas de Cercis.

El robot se acerco a una plataforma que me llevaba a una puerta, su paso era lento así que me veja como pude, me costaba mantenerme en pie, pero el color de mi piel se estaba normalizando.

Estuve parada en la plataforma un buen tiempo hasta que un robot distinto al que me había llevado hasta allí apareció y abrió la puerta al pasar, yo me cole como su sombra y entre a una sala pequeña en cuyo interior había una puerta enfrentada a la puerta por la que había entrado y mas al centro de la sala había una mesa maciza circular con forma de cilindro cuya base estaba protegida por un vidrio, me acerque y vi a través del cristal que en su interior habían tres llaves iguales, mas abajo, al descubierto había un tablero con números, un led rojo apagado uno verde de la misma manera y uno amarillo que se encontraba encendido, estaban también hay dos pantallas pequeñas una con la capacidad de mostrar dos cifras y la otra solo cuatro, lo cual me llevo a pensar que para acceder a la segunda clave primero hay que poner la primera, osea que eran dos claves que formaban una para poder abrir la capsula de vidrio y conseguir la llave.

Pase gran parte del tiempo privando combinaciones de números que pudieran ser factible, pero no progresaba, seguía sin ver mejoras, de repente por la puerta que se encontraba enfrente mio veo entrar otro robot, distinto al anterior, abre la capsula de vidrio, las llaves estaban sujetas con unas abrazaderas, el robot injerta una llave en el tablero de la lave y las abrazaderas se abren, yo rápidamente y al azor todo cualquiera de las llaves, cuando el robot vuelve a atravesar la puerta yo lo sigo detrás, llegue aun lugar lleno de robots desactivados, eran iguales a aquellos que buscaban los cuerpos en las celdas, había millones en filas, en frente mio había una puerta maciza de hierro que seguramente me conducía al exterior, de repente veo que uno de los robots se activa y a su vez lo sigue otro detrás que se activaron a un tiempo parecido, los veo travesar una puerta pequeña que había oculta en un pasillo, por lo menos cuatro robots habían salido por esa puerta, por una puerta que se encontraba al otro lado venían otros robots y ubicarían en fila, luego se desactivaban, pase por la puerta grande metálica y aun no llegaba a el exterior habían miles de puertas mas y una igual a la que estaba detrás mio. Esta sala era menos iluminada y tenia unos grandes embudos, los robots traían cadáveres en sus palas y los arrojaban por ahí, el piso vibraba cuando los cadáveres caían, creo yo que había una especie de maquina que los trituraba para conseguir una rápida degradación, los cadáveres no se pudrían con facilidad debido a que existe una baja cantidad de bacterias en el lugar, salían y entraban de distintas puertas robots con cadáveres, todos se dirigían al embudo los arrojaban y venían otros que procedían de igual manera.

Corrí y esquive los robots que venían e iban hasta llegar a la puerta que estaba al fondo de la sala, se abrió sola como la anterior, y pase a una sala parecida pero sin puertas y sin embudo, nada había, excepto tres puertas, me acerque a ellas y no eran de gran tamaño como las otras, tenían el tamaño de una puerta normal, intente abrir una con la llave , debido a que estaban cerradas, y simplemente se abrió, lo que mas me sorprendió es el formato antiguo que tenia la llave, era un mecanismo físico y no uno electrónico.

Pase por la puerta y vi el cielo era azul con mil estrellas que brillaban, era el cielo de Agmar, delante mio estaba la muralla que rodeaba la cárcel, camine despacio hasta un hangar deposito donde se encontraba una gran nave de tripulación, estaba abierta, no había nadie en la cabina principal cuando entre, aunque parezca extraño esperaba encontrar a alguien debido a que necesitaba ayuda y el echo de saber que jamas me compararían con un prófugo de Cersis me transformaba solo para quien me encontrara en un ser vulnerable y poco dañino, es imposible que alguien escape de Cersis, ni los muertos pueden salir de allí.

No encontré a nadi, tenia que regresar a Arista, pero no podía hacerlo sobre una nave de tripulación tan grande como esta, entonces comencé a recorrerla y encontré entre tantas cosas un uniforme de la union estelar coelorica, un grupo de pilotos especializados que trabajan para el parlamento, tenia frio y lo use, segui recorriendo la nave en busca de naves de escape, eran mas pequeñas y podía con ellas llegar a Arista sin problemas.

Solo había tres naves de escape, subí a una de las tantas y la nave me identifico como la capitán Rania de la flota interestelar de Coelorus, el parlamento iba a matarme por robo de transporte y usurpación de identidad.

Emprendí vuelo con la nave, al principio volé al ras de la tierra y observe las grandes extensiones de desierto, luego me eleve al espacio, en poco tiempo llegue a Arista, donde en vuelo la computadora volvió a identificarme como Rania, al entrar en el espacio aéreo de Arista la nave se condujo sola hasta la federación de la flota interestelar de Coelorus, donde evidentemente se dieron cuenta de que yo no era Rania, de todas maneras me atendieron amablemente y me enviaron con el parlamento el cual al verme viva y sorprenderse me pidió disculpas por lo sucedido debido a que se había descubierto que Corven tenia influencias política y que la computadora no reacciono ante sus abusos conmigo pero había registrado los echos y fue eso lo que llevo a la sentencia de Corven por traición a el honorable parlamento y a Rithsma como cómplice, ambos fueron condenados por anticresista a el destierro, entonces me ofrecieron un puesto en el parlamento como cenadora, lo acepte ya que no tenia nada nuevo que hacer, cuando llegaron las elecciones misteriosamente fui electa por los mismos que me sentenciaron para que cumpliera el rol de jefa de ministro, lo primero que hice fue hacerlos echar lejos de cualquier plantel político por poco éticos. incorporaron nuevos ministros al parlamento y yo continué mis investigaciones en Arista, por supuesto que ya no trabajaba con los grupos sino que todo esto me llevo a conseguir puestos importantes y mis investigaciones acerca de el comportamiento nesic habían traído ha bances a nuestra tecnología.

Volví a ver a Ikarus, que seguía ahí como siempre, le presente un proyecto para acceder en los campos nesics con facilidad, es un prototipo llamado Eitary que se transformo en una tortura, pero es muy útil para acceder a territorio enemigo.